''Mirá, nuestras manos encajan re justo ¿no?'' me dijiste esa vez que salimos a caminar bajo el sol. Yo te miré, sonreí y seguí caminando, sabiendo que esas palabras, fueron la caricia que a mi alma le faltaba.
¿Por qué es tan difícil que me quieras querer como yo a vos? Estoy tratando, y no es tarea fácil olvidarte. No. Porque más allá de todo, no te quiero olvidar.
Quiero hablarte, verte, sentarme en una plaza con vos y que me cuentes muchas anécdotas de tu trabajo mientas veo como te enojas, como te reís y como me mirás. Tu mirada es la magia de mi vida. Te amo con cada partecita de mi corazón, y dudo que algún día lo sepas entender.
No tengo ganas de querer a nadie más, porque sé que iría a pasar lo mismo. No quiero llorar más por vos ni por nadie. Pero me resulta imposible sacarte de mi cabeza.
¿Tan difícil será poner la mirada sobre una persona como yo? No soy lo mejor del mundo, lo reconozco eh. Pero tengo un corazón tan fácil de querer, que si pudiera, yo misma elegiría que alguién me quiera como yo quiero a los demás.
Al fin y al cabo, yo solo quiero tomar tu mano y acompañarte a tomar el bondi por las mañanas (todas las mañanas de mi vida) Quiero que me abraces en cada semáforo como siempre lo hacés, y tomemos otro café de vainilla en la Alsina. Qué me celes de mis amigos y acaricies mi cara todo el tiempo mientras me mirás. Quiero hundirme en vos y despertar en tu piel. Así, toda mi vida.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Arrancacorazones.