El viaje en colectivo puede ser, quizás, un momento reflexivo o mucho menos que eso, pero se entiende que pensar a veces significa "reflexión".
El paseo te invita a cerrar los ojos y dejar que el viento te pegue en la cara, mientras tú cabeza vuela a km de acá.
¿que está bien? ¿que está mal? todo es relativo... ¿todo lo es?
Hablamos de relatividad cuando lo menos que pensamos es eso, hablamos de dignidad cuando ni siquiera sabemos cuándo la perdimos, hablamos de amor cuando siquiera quisiste a alguien por más de tres semanas, hablamos de esfuerzo cuando nos quejamos de estudiar un día nublado. Hablamos de tantas cosas, que ya no sabemos de qué hablar.
Y por eso hoy elijo sentir ante pensar o decir. Porque no nos sirve de mucho el tiempo que perdemos pensando mientras la vida sigue su curso, mientras los momentos se extinguen y nos deja atrás con ese sabor amargo.
Pensemos en esas cosas que vivimos, al cabo de un tiempo pensamos en porque no dijimos o hicimos otra cosa. Un tiempo o veinte minutos después. Pero los momentos no se repiten, viví!
Te quiero porque me haces bien, te quiero porque sos todo lo que busqué alguna vez en una persona. Y finalmente te quiero, porque no te puedo querer. Vivamos en eso que no sabemos cómo explicar, quizás esa sea la respuesta.
Esperaría que no te asuste este sitio de sinceridad donde mi corazón vomita su verdad.
lunes, 11 de abril de 2016
Todo el silencio del mar, por tus abrazos.
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Arrancacorazones.