tengo que empezar a preocuparme (o que no me importa más)

Quizás, quizás en algún momento pensé y soñé que iba a ser posible. Que iba a ser posible despertar todos los días a su lado, hacerle café, cantarle y acariciar su pelo. Tomar su mano y caminar sin rumbo aparente (tal y como la primera vez que lo hiciste para ayudarme a pasar por la vereda rota), ir a una plaza y sentarnos a hablar, y terminar abrazados. Que me espere a la salida del colegio o del trabajo, y me dé un beso de esos que te quitan el habla. Luego que me acompañe a la parada, o que simplemente caminemos juntos.
Nunca pasó, ni va a pasar. Simplemente no. Sos eso que amo más que todo pero no lo puedo tener, quizás se trata de un momento que nunca debió pasar: Quizás jamás tuve que haberte conocido, jamás tuviste que volver, jamás tuvo que haber pasado nada.
Tal vez sos esa persona que se hace amar por su forma de ser, o que atrae amor a su paso. No soy la única que siente esto. Está ella, pero ella tiene motivos para sentirse así, te mereció y fue lo mejor que le pasaste. A mí sólo me tocó una parte de vos, y verdaderamente no me quejo, pero paso horas pensando en que pasaría si te hubiese conocido en otras circunstancias o si simplemente vos me hubieses visto de otra manera desde el principio.
Como dije, sos todo lo que quiero. Sos aquello inalcanzable, aquello que tenemos presente en cada pasao de la vida (y te juro, no exagero) No me explico como es que te deseo tanto, no te puedo olvidar.
Estar en Bariloche y recibir tu mensaje en pleno almuerzo, fue lo mejor pero lo mejor que me pasó. Y mucho más, que me dijeras que me querías ver. Ese día, fue el más lindo que tuve. Sueno muy idiota, lo siento, pero no me sale de otra forma. Tus abrazos y besos me llenaron el corazón, me llenaron el alma de amor y reviviste todo lo que hacía tres años creí que estaba muerto.
Esa mañana con vos, la segunda salida, era lo que más desee. Desayunar y luego caminar juntos, mientras caminaba te miraba y juro que no podía creer que estaba a tu lado. No creía lo hermoso que te veías luego de trabajar toda la noche, así de despeinado y cansado te vería todos los días y no me hartaría. Te acompañe a que te tomes el colectivo proque yo también tenía que irme, me abrazabas y estaba en el cielo. Con el sueño y cansancio reflejados en tus ojos, te despediste con un beso y subiste.
Repito: Te amo y nunca va a pasar, vas a vivir en mi corazón siempre. Tal vez, en algún momento ya no sienta nada al mirarte, al mirar tus fotos, al leer tu chat, al imaginarte con otra persona, al leer las cosas de ella; pero ayer, hoy, y creo que mañana, voy a caer a tus pies si me llamas y pedís verme. Porque así lo siento.
Pero también es eso, querés verme, y yo tengo miedo de tus intenciones conmigo. Aunque la verdad, te quiero demasiado como para que me importe que juegues conmigo. Necesito hacerme bien a mí, y si a vos no te pasa lo mismo, que más da, voy a ser feliz con lo poco que me puedas dar. Porque es así, así es el amor y uno debe vivir en base a eso.
No tiene sentido llorar, no tiene sentido nada que se respecte a pensar otra cosa que tenga que ver con vos y conmigo. No hay un vos y yo, hay un vos y un yo en paralelo.