(...) ¿Cómo podría yo saber lo que usted iba a pensar lo que pensó de mi y que iba a tratar de protegerme?
Yo que estaba ahí para eso, para que lo dejarán irse.
Habia demasiada distancia, demasiadas imposibilidades entre usted y yo; habíamos jugado el mismo juego, no había manera de hacerle comprender (...)
A partir de ahora iba a ser diferente si usted lo quería, a partir de ahora seríamos dos para venir en las noches de lluvia, tal vez así saliera mejor, o por lo menos sería eso, seríamos dos en las noches de lluvia
Esperaría que no te asuste este sitio de sinceridad donde mi corazón vomita su verdad.
miércoles, 2 de octubre de 2019
miércoles, 25 de septiembre de 2019
🌹
Esto del tiempo es complicado, me agarra por todos lados.
Me empiezo a dar cuenta poco a poco de que el tiempo no es como una bolsa que se rellena.
Quiero decir aunque cambie el relleno, en la bolsa no cabe más que una cantidad y se acabó.
¿Ves mi valija, Bruno?. Caben dos trajes y dos pares de zapatos. Bueno, ahora imagínate que la vacías y después vas a poner de nuevo los dos trajes y los dos pares de zapatos, y entonces te das cuenta de que solamente caben un traje y un par de zapatos.
Pero lo mejor no es eso. Lo mejor es cuando te das cuenta de que puedes meter una tienda entera en la valija, cientos y cientos de trajes.
Como yo meto la música en el tiempo cuando estoy tocando, a veces. La música y lo que pienso cuando viajo en el metro.
▪EL PERSEGUIDOR / Julio Cortázar.
En mi valija, que es mi cerebro, guardo tu recuerdo. Tus miradas, tus poemas, tus caricias a mi alma, cada sonrisa que ponias en mi rostro, la música que me regalabas, los libros que leíamos.
Y si vacias todos esos recuerdos que llevo y los vuelves a meter, te darás cuenta que caben los mismos, si los pones un poquito apretados, cabe. ((te estoy esperando.))
Me empiezo a dar cuenta poco a poco de que el tiempo no es como una bolsa que se rellena.
Quiero decir aunque cambie el relleno, en la bolsa no cabe más que una cantidad y se acabó.
¿Ves mi valija, Bruno?. Caben dos trajes y dos pares de zapatos. Bueno, ahora imagínate que la vacías y después vas a poner de nuevo los dos trajes y los dos pares de zapatos, y entonces te das cuenta de que solamente caben un traje y un par de zapatos.
Pero lo mejor no es eso. Lo mejor es cuando te das cuenta de que puedes meter una tienda entera en la valija, cientos y cientos de trajes.
Como yo meto la música en el tiempo cuando estoy tocando, a veces. La música y lo que pienso cuando viajo en el metro.
▪EL PERSEGUIDOR / Julio Cortázar.
En mi valija, que es mi cerebro, guardo tu recuerdo. Tus miradas, tus poemas, tus caricias a mi alma, cada sonrisa que ponias en mi rostro, la música que me regalabas, los libros que leíamos.
Y si vacias todos esos recuerdos que llevo y los vuelves a meter, te darás cuenta que caben los mismos, si los pones un poquito apretados, cabe. ((te estoy esperando.))
domingo, 15 de septiembre de 2019
Cíclope
Me miras, de cerca me miras, cada vez más de cerca y entonces jugamos al cíclope, nos miramos cada vez más de cerca y nuestros ojos se agrandan, se acercan entre sí, se superponen y los cíclopes se miran, respirando confundidos, las bocas se encuentran y luchan tibiamente, mordiéndose con los labios, apoyando apenas la lengua en los dientes, jugando en sus recintos donde un aire pesado va y viene con un perfume viejo y un silencio. Entonces mis manos buscan hundirse en tu pelo, acariciar lentamente la profundidad de tu pelo mientras nos besamos como si tuviéramos la boca llena de flores o de peces, de movimientos vivos, de fragancia oscura. Y si nos mordemos el dolor es dulce, y si nos ahogamos en un breve y terrible absorber simultáneo del aliento, esa instantánea muerte es bella. Y hay una sola saliva y un solo sabor a fruta madura, y yo te siento temblar contra mí como una luna en el agua.
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